Desde el 29 de diciembre de 2022, el Real Decreto 1055/2022 está en vigor, introduciendo transformaciones clave en la responsabilidad ampliada de los productores de envases. La normativa impone una serie de responsabilidades a los productores, desde la implementación de planes de prevención y ecodiseño hasta la consecución de metas específicas de reciclaje.

Esta regulación busca alinearse con la Directiva 2018/852 y representa un paso significativo hacia una economía circular más sólida. Las obligaciones también se extienden a la creación de sistemas de depósito y retorno de envases reutilizables, así como la financiación de la gestión de residuos de envases. Un punto destacado es que la disposición transitoria requiere que los productores sin obligaciones previas establezcan sistemas de responsabilidad ampliada antes del 31 de diciembre de 2024.

La elección entre sistemas individuales o colectivos plantea consideraciones legales, económicas y técnicas. La decisión influirá en la eficacia del cumplimiento de estas nuevas obligaciones. Este cambio trae consigo una oportunidad para una gestión de residuos más sostenible y promueve un futuro ambientalmente consciente.